domingo, 13 de septiembre de 2015

LA CARTA DE COLÓN



Alberto Casas Rodriguez




           
  El célebre mensaje de Cristóbal Colón anunciando el descubrimiento de las Indias, nombre con el que por primera vez se nombran las tierras acabadas de descubrir,  mensaje conocido como la Carta de Colón, en la que el descubridor da cuenta del éxito de la empresa oceánica que comenzó un 3 de agosto de 1492 en el puerto de Palos de la Frontera. La Carta está fechada el 4 de Marzo (1493), día de su arribada a Lisboa y comienza así:

Señor, porque se que aureis plazer de la grand vitoria que nuestro señor me ha dado en mi viaje vos escriuo esta por la ql sabréis como en uente dias pase a las Indias………………………………………………………………………………………..

   Colón zarpó de Lisboa el 13 de Marzo y el 15 por la mañana fondeó en Palos completando el ciclo trasatlántico. Curiosamente, las tres fechas fundamentales del Descubrimiento coinciden en viernes: la de la partida, el 3 de Agosto, la del Descubrimiento el 12 de octubre, y la del regreso a España el 15 de marzo; ¿casualidad o Colón evitaba los sábados, el sabbath bíblico?

   Una vez desembarcado, envió la Carta a los reyes, de cuya constancia da fe, el 22 de marzo, el Libro de las Actas Capitulares de la ciudad de Córdoba: estos sennores vieron una carta que enbio Colon de las yslas que falló…. La más conocida es la dirigida a Luís de Santángel, Escribano de Ración del Reino de Aragón, quien autorizó su divulgación e impresión que se encargó al presbítero catalán Pedro Posa que la publicó en Barcelona en 1493. La lectura de las maravillas que encerraban las tierras descubiertas produjo una enorme impresión:

… fertilísimas en demasiado gradollenas de árboles de mil maneras y altas, que parecen que llegan al cielo y tengo por dicho que jamás pierden la hoja, según lo pude comprender, que los vi tan verdes y tan hermosos como son por mayo en España… y cantaba el ruiseñor y otros pajaritos… hay campiñas grandísimas, y hay miel, y de muchas maneras de aves y frutas muy diversas… los puertos de la mar, aquí no habría creencia sin vista, y de los ríos muchos y grandes y buenas aguas; los más de los cuales traen oro... En la isla Juana hay muchas especierías, y grandes minas de oro y de otros metales… La gente de esta isla y de todas las otras que he hallado y habido noticia, andan todos desnudos, hombres y mujeres, así como sus madres los paren, aunque algunas mujeres se cobijan un solo lugar con una hoja de hierba o una cofia de algodón que para ello hacen… adonde yo llegaba andaban corriendo de casa en casa, y a las villas cercanas con voces altas: venid, venid a ver la gente del cielo… pueden ver Sus Altezas que yo les daré oro cuanto hubieren menester… especiería, algodón, almaciga, linóleo, ruibarbo y canela y otras mil cosas de sustancia…………………………………………………………… ………………………

Ellos de cosa que tengan, jamás dicen que no; antes convidan la persona con ello, y muestran tanto amor que darían los corazones, y, quieren sea cosa de valor, quien sea de poco precio, luego por cualquier cosica, de cualquier manera que sea que se les dé, por ellos se van contentos. Yo defendí que no se les diesen cosas tan viles como pedazos de escudillas rotas y pedazos de vidrio roto, y cabos de agujetas, aunque cuando ellos esto podían llegar, les parecía haber la mejor joya del mundo…………………………………………………………..

   Colón termina la narración con una proclama apoteósica, arrogante y profética:
Así que pues nuestro Redentor dio esta victoria a nuestros Ilustrísimos rey y reina y a sus reinos famosos de tan alta cosa, adonde toda la cristiandad debe tomar alegría  y hacer grandes fiestas, y gracias solemnes a la Santa Trinidad, con muchas oraciones solemnes por tanto ensalzamiento que habrán, en tornándose tantos pueblos a nuestra Santa Fe, y después por los bienes temporales que no solamente a la España, más a  los cristianos tendrán aquí refrigerio y ganancia. Esto según el hecho asi en breve. Fecha en la carauela, sobre las Islas Canarias, a XV de febrero de MCCCCLXXXXiii.
Fará lo que mandaryes.

El Almirante.
  
El Ánima contenida dentro de la Carta esta fechada el 14 de marzo.

Esta Carta enbio Colom al Escribano de Ración de las Islas halladas en las Indias. Contenida a otra de Sus Altezas.

   En la carta que escribió a Rafael Sánchez, Tesorero de los mismos Serenisimos Monarcas, similar a la de Santángel, impresa en Roma el 25 de Abril de 1493, y traducida del castellano al latín por Leander de Cosco, el Almirante se explaya: Celébrense procesiones, háganse fiestas solemnes, llénense los templos de ramos y flores; gócese Cristo en la tierra cual se regocija en los cielos…La forma de expresar Colón sus sensaciones y emociones, ocultando los aspectos negativos, como el naufragio de la Santa María, la convierten en una Carta abierta por su carácter populista, triunfalista y profética, que propició su rápida difusión por toda Europa, incluso versificada, impresa en Junio de 1493 y conocida como el Poema de Dati (el único ejemplar se conserva en la Biblioteca Colombina de Sevilla).
   En 1889 el anticuario francés J. Maisonneuve comunicó al mundo entero que la había adquirido en España (en 1818 estaba en el Archivo de Simancas), tesoro histórico y bibliográfico, absolutamente sin rival en el mundo entero.., y estaba dispuesto a venderla por 65.000 francos, unos 4 millones de euros en la actualidad. La Carta fue comprada por el anticuario inglés Bernard Quaritch quien la revendió a los Estados Unidos donde está depositada en los fondos de la Colección Lennox en la New York Public Library. En 1862 se encontró la segunda edición castellana de la Carta, llamada la Ambrosiana, al haber sido descubierta en la Biblioteca Ambrosiana de Milán, procedente del legado donado por el barón Pietro Custodi. Esta edición fue impresa en Valladolid en 1497, en los talleres de Pedro Giraldo y Miguel de Planes.
   Lamentablemente se silencia que el primero que informó a los reyes del Descubrimiento de las nuevas tierras fue Martín Alonso Pinzón, mediante una carta que mandó desde Bayona el 1 de Marzo de 1493, acompañada de la carta-relación enviada por el regidor de la villa, Payo Veloso, notificando a Sus Altezas que se encontraban en Barcelona, la arribada de la carabela Pinta al puerto gallego.